Certamen Interplanetario de Poesía Amigo Guillermino Fadenel 2011

Certamen Interplanetario de Poesía Amigo Guillermino Fadenel 2011
Convoca a todos sus amigos (enemigos abstenerse)

Bienvenidos queridos lectores:

Ahora toca el turno a los premios literarios. Así es compañeros de letras. Como para las novelas existe el Premio TV y Novelas, y para las películas (aquí en México) los Arieles, así dentro del mundo poético existen esos Premios con los que todo bardo sueña que algún día caminará por la alfombra roja de las Letras Mexicanas. Aunque, hay que decirlo, muchos de estos deseosos, últimamente, han tomado conciencia de que ganar uno de estos galardones, en vez de traerles prestigio, les traerá deshonrra y por ende "desprestigio", y aunque tal vez los saqué de pobres por un par de meses, también saben que los sumergirá en el canal profundo del "sospechosismo" nacional, colocándolos no sólo junto a otras "luminarias" del estercolero del país de la poesía, sino que también los pondrá en el catálogo de los "mafiosos" más abusivos e "inteligentes".

Para encabezar esta emocionante lista tenemos los Juegos Florales, que afortunadamente abundan, pues se dan de manera silvestre en todas las entidades de la República, y se realizan, en su mayoría, durante la época de Carnaval. El premio son flores, tanto verbales como ejidales, y también una modesta suma de dinero. Estos son los premios que más cargan los poetas en sus bandejas curriculares, aunque para muchos de los expertos (es decir, de los que dicen que saben lo que no se debe saber) aseguran que estos premios NO VALEN NADA porque no están avalados por el ISO 9000 de la poesía nacional.

Y hablando de carnavales... cómo olvidar el Festival Iberoamericano Navachiste, que carga en el Navachiste la condena, y en el que la única condición para participar es que guardes un poemario bajo la manga dentro algunas de las tiendas de campaña en las que se hospedan los participantes, que son pocos, y eso siempre da al concurso un carácter íntimo y familiar, por no ocupar términos políticos, digamos que es una pequeña "fiesta de amigos". Este año invitaré a mi porra poética (gracias, amigos, si no fuera por ustedes nunca hubiera ganado los tres Slam's Poetrys a los que fui, en donde también los escogieron de jurado, sin saber que venían conmigo), y yo creo que en esta ocasión mi amigo Guillermino Fadenel, mal acusado de poetastro por nuestros enemigos, envidiosos de nuestro talento o talante, sí anda ganando este premio, pues aunque él diga que no, yo creo que esos chistes que siempre nos cuenta, si los escribe, tendrá un mejor poemario que el de muchos poetas triunfadores.

A estas alturas todo el panorama parece un gran chiste y hasta los concursos "más famosos", incluyendo el Premio Nacional Aguascalientes, pueden ser ganados con una paráfrasis (por no decir "cut and paste"), con algún collage, o con simples citas bien acomodadas (de autores que todo el mundo reconoce o bebería reconocer de una ojeada) a manera de poemas, siempre mezclándolos bien (como buen DJ) pues no se puede "subestimar a los lectores conocedores de Poesía", ya lo dijo el párroco de la poesía, Javier Sicilia: "no puedo pensar que el mexicano promedio desconozca de quién es esa frase de todo ángel es terrible"

Otro de estos Premios Nacionales, es el Elías Nandino (que ha de estar dando de patadas en su tumba, pobre doctor), pero tendré que decir "lás-ti-ma- Gui-ller-mino", pues a sus casi 60 años de vida, acaba de descubrir que no podrá realizar uno de sus más grandes sueños, que era ganar este galardón. Ups. Llegó unos lustros tarde: no hay por qué acongojarnos, así pasa seguido en nuestra vida nacional. Y que por cierto, de todos modos este concurso, como la "trascendencia misma" ya está apartado para nuestros "mejores jóvenes poetas vivos" (y esta cita, o paráfrais -no vayan a acusarme de plagiador- es de Da-vil Huerta), el cual ya tiene detectores especiales en los hospitales para saber cuándo nace un poeta. O en algún otro caso, sabemos que tienen su pase automático los alumnos de ciertas Fundaciones o esferas universitarias, en donde se enseña de pie a pa el manual de Carreño de las letras aúreas.

O qué tal eso de saber cantinflear a la hora de explicar el porqué nos dio algún premio el séquito de nuestros amigos. Cosa con la cual Claudia Posadas, nos dio cátedra, y contestó tranquila, confiada, segura: "No es lo mismo un “libro inédito de poemas” que un “libro de poemas inéditos”". (Woooow, aplaude la muchedumbre). Todo está en tener buenos amigos, dispuestos a dar un poquito de ayuda, y hacerse de la vista gorda si reconocen nuestra obra a la hora de dar el veredicto. Después de todo, son honestos al reconocer que ellos y sus amigos son los que merecen esos premios (y tienen pruebas, eh).

Pero para los más desafortunados, los mal encarados, los que no saben lucir una sonrisa, o para los que en pocas palabras, no tienen amigos reconocidos, sólo les queda más que ladrar, y de lejitos, si es que como buen nerd de serie gringa sigue esperando que algún día lo acepten (tal y como es) en esos grupos influyentes.

Así es como se manejan los Premios, que bien podemos encontrarlos también sobre la acera de la Alameda, donde la policía montada los deja a cada metro. Y mientras estas buenas personas se reparten el pastel en grandes tajadas, no falta el buen ciudadano que recomienda a los poetas despistados nóveles: "tú pide la beca, tú concursa, es dinero del pueblo, no sientas culpa". Y los ingenuos, en este caso, mejor digamos, ingnorantes, si bien les va, tardan años de "servicio social" para entrar en alguno de estos bondadosos grupos, y obtienen años después algún premio, beca o plaza universitaria, etc. Y si no les va bien, pues se dedican a otra cosa (meseros, artesanos, taxistas, profesores en secundarias o prepas, chicos IBM, o desempleados profesionales). O si son de esos que no se resignan, mejor se resienten y forman un proyecto "underground" de los 100 ejemplares únicos.

Y para finalizar, ahí les dejo esta frase (de la cual no anexo la cita, porque todos ustedes la deben de conocer):

"No me es extraño lo de los robos en los premios, lo de las becas regaladas a amiguitos o alumnitos, lo de los erarios vilipendiados, así como los ecocidios literarios (un chingo de árboles muertos para unos poemas que te parecen una mierda), ok, lo sabemos. Es parte del México que tenemos, es el reflejo de la política, de los gobernantes, y eso no va a parar... hay que denunciarlo, claro que sí, pero me repito: En cuestión de logros literarios, el que esté libre de pecado, que renuncie a la oportunidad que le dan de ganarse un premio, una beca, una edición, o una oportunidad de viajar gratis y con todo pagado a algún encuentro a emborracharse..."

Si escucha música, no son mariachis, pero igual nos subimos al balcón.
Hasta la próxima.


roberto.absenti@gmail.com